jueves, 31 de enero de 2008

Estar a régimen... No es tan duro.


Me gustaría poder transmitiros mi experiencia a la hora de hacer un régimen alimentario. Durante años pasé haciendo dietas salvajes para perder rápidamente 3 o 4 kilos y, claro, luego recuperar esos 4 más algunos añadidos.
Esta es la historia de cientos de personas cada día que intentan sin éxito bajar de talla.

El error de base es intentar hacer un régimen temporal. Nadie puede estar a dieta eternamente. Si se toma como un período transitorio, el fracaso está asegurado.

Me costó darme cuenta de que la clave del éxito está en cambiar los hábitos de alimentación. Si cambias el "chip" y eres capaz de cambiar tu forma de comer de manera habitual para siempre (alguna excepción se puede hacer muy de vez en cuando. Cuando ya has perdido todo el peso que te sobra), es posible conseguirlo. Yo lo hice.
Ya saben algunos lectores de este blog que yo perdí 22 kilos hace más de 10 años. Es verdad que necesité de sacrificio y de fuerza de voluntad. Quien diga que conseguir una meta es muy facil y se puede conseguir sin esfuerzo, miente. Miente como un bellaco. Todo requiere un esfuerzo, pero en este caso no es un esfuerzo tan titánico como todos pensamos.

Hay varios puntos inamovibles mientras cambias de hábitos. Éstos deben ser respetados sin excepción durante el tiempo que dura el habituamiento del cuerpo a la nueva forma de comer. Es necesario ser inflexible, tajante, intolerante con eso de ...: "por una vez..." "total, solo hoy. Mañana me pongo...". Eso, es tener todas las papeletas para el fracaso, la frustración y la entrada en esa espiral que todos conocemos y que tan mal nos hace sentir.

A veces es mejor esperar a estar psicológicamente preparado para ponerse a ello, (es como dejar de fumar) antes que precipitarse y fracasar. El fracaso en sí mismo no es importante, pero a la hora de volver a empezar, cada vez tiene uno menos confianza en sí mismo, y eso no es bueno.
Una vez concienciado de respetar las normas básicas durante, al menos, tres meses, es el momento de ponerse a ello.

Algunos mitos:

"Tengo que contar cada caloría que tomo". Contar calorías no sirve para nada. Os aseguro que como muchísimas calorías a lo largo del día y no engordo por eso.

"La fruta no engorda". Pues lo siento, pero si engorda. Sobre todo si se come tras otra comida. La razón es bastante sencilla y lógica. Cuando la fruta cae al estómago lleno de otros alimentos, fermenta muchísimo más que con el estómago vacío. Al fermentar produce alcohol y engorda una barbaridad.
Tomada en ayunas o a dos horas de distancia de otras comidas, engorda también porque contiene muchos azúcares. También depende de las frutas. Según todos los nutrólogos, la manzana es la mejor fruta en todos los aspectos. Yo tomo poca fruta. Suelo ponerla en los postres.

"Cuanto menos coma, más adelgazo". ¡Mentira! hay que comer, hay que comer hasta no tener hambre. Es peligrosísimo entrar en el juego del ayuno. Produce daños irreversibles en el organismo y cuando comes recuperas inmeditamente lo perdido.
Es imprescindible (y esta es una de las normas inamovible) comer al menos 4 veces al día. Desayuno, comida, merienda y cena.

Otra de las premisas importantísimas (no sabéis cuánto) es no saltarse nunca una comida. Os voy a explicar qué ocurre en el cuerpo cuando le sometes a períodos largos sin ingerir ningún alimento.
Como bien sabéis el cuerpo es una máquina cuasi perfecta, diseñada para sobrevivir. Todos sus recursos, la naturaleza los enfoca a la supervivencia. Cuando pasan muchas horas sin comer el cuerpo se resiente y al recibir comida, (cualquiera que sea) asume que ha de aprovechar al máximo todas sus grasas, proteínas y demás elementos en previsión de otro largo período de ayuno. Es decir, tu vas y dices "pues hoy no como al medio día y así adelgazo". Bueno, pues siento decirte que cuando tomes tu merienda o tu cena te engordará una barbaridad porque tu cuerpo aprovechará todo al máximo.

Otra cosa importante. La cena no debe ser muy abundante pero no te quedes con hambre. Y es bastante aconsejable cenar al menos, 2 horas antes de ir a la cama.

Bueno después de todo este rollo os voy contar lo peor. Hay cosas que tenéis que desterrar de vuestra vida (de momento durante tres meses) para siempre y considerarla como una excepción en vuestra alimentación de aquí en adelante. Son alimentos que contienen muchísimos hidratos de carbono, azúcares y productos refinados.

Hay personas que piensan que hay que comer de todo. Que ningún alimento puede ser eliminado de una dieta normal. No estoy de acuerdo, los alimentos contienen un montón de sustancias que se encuentran en muchos de ellos. No pasa nada por eliminar un alimento que te daña y te engorda. Y en cuanto a los azúcares (también hay personas muy defensoras de ellos) diré que hay azúcares naturales en muchísimos alimentos. En la fruta (la frutosa), como lactosa (de los lácteos) o la glucosa que contienen muchos tubérculos. Por lo tanto tu alimentación sigue siendo válida ya que es verdad que el cerebro, para funcionar necesita azúcares. Que son los que se se queman de inmediato y producen la energía puntual.

En cuanto al azúcar habría mucho que decir. El azúcar refinado es un veneno en nuestro cuerpo. No es bueno para nada. El efecto que produce en el organismo es de bienestar inmediato, después éste se consume rápidamente y provoca un bajón de azúcar en sangre, que te hace sentir fatal y te "obliga" a volver a comer para sentirte bien. Es facilisimo entrar en su juego. Tu te comes un bollito a media mañana, de momento te sientes genial. En unos minutos el azúcar ha pasado a tu torrente sanguíneo y con la actividad física y cerebral, en muy poco tiempo es consumido provocando la curva inversa en glucosa, vuelves a comer y vuelves a consumirlo y vuelves a tener hambre. Total. Un desastre, con hambre todo el día y engordando sin parar.

Como ya habréis adivinado uno de los alimentos que debéis desterrar de vuestra vida es el azúcar. Todo tipo de azúcar: Tanto la fructosa, como el azúcar de caña "integral" o la lactosa, la glucosa, sacarosa y todos los "osa". Si queréis endulzar cualquier alimento hay en el mercado un montón de edulcorantes de origen quimico que no continenen ningún tipo de azúcares. Personalmente os recomiendo el aspartamo, pero hay sacarina, en polvo, en líquido y en pastillas muy cómodas de utilizar. Toda la repostería que hago la endulzo de esta manera.

Otro de los males actuales es la falta de fibras no solubles que ingerimos. La fibra es fundamental para limpiar y arrastrar de nuestro cuerpo todo lo que no sirve. Facilita como ya sabéis, el tránsito intestinal.

El pan, ¡Horror! el maravilloso pan. Lo siento. Fuera pan. Durante los tres primeros meses intenta no tomar ningún pan. Y tu me dirás ¿Y cómo como sin pan? Pues, comiendo.
Te aseguro que al principio descubrirás que la comida sabe diferente, intenta disfrutar lo sabores sin mezclarlos con el pan. A mi me costó bastante trabajo no tomar ese crujiente alimento que me encanta. Pero lo hice y ahora lo tomo integral siempre que me apetece.

Esto se alarga mucho. Creo que continuaré mañana con el resto de alimentos prohibidos y recomendaciones que a mi me ayudaron muchísimo.

De las recetas del blog hay una tarta de manzana integral que tal vez deberíais hacer y probarla, es exquisita y yo desayuno una porción muchos días.

Perdonarme por no terminar hoy el artículo pero es muy extenso y aún quedan algunas cositas.
Un saludo.
Decidme si va quedando claro y os contesto a todas las dudas a la tarde.
Natacha.

miércoles, 30 de enero de 2008

Ensalada fría de garbanzos.


Una ensalada fresquita, muy nutritiva y crujiente. Todos sus ingredientes, excepto los garbanzos van en crudo muy picaditos. Es una ensalada para llevar a comer fuera. Para dejarla hecha del día anterior (toma mejor el aliño) y para que lo coman todos.

Los ingredientes son sencillos, baratos y creo que todo el mundo puede tomarlo (incluso diabéticos y personas a dieta).

Ingredientes para 2 personas:
  • 2 pimientos verdes.
  • 1 pimiento rojo.
  • 1 cebolla grande.
  • 1 latita de atún en aceite de oliva.
  • 250 gramos de garbanzos cocidos (yo utilizo de bote, salen buenos)
  • 150 gramos de salmón ahumado.
  • 30 ó 40 aceitunas sevillanas sin hueso.
  • Vinagre de Jerez.
  • Aceite de oliva y sal.
  • También se le añade 1 huevo cocido. Yo no lo pongo porque un miembro de mi familia es alérgico.
Modo:

Pica todos los ingredientes, mezcla con los garbanzos y aliña a tu gusto. Te recomiendo que utilices el vinagre de jerez, no tiene nada que ver con otros vinagres.

Si lo aliñas el día anterior está más rico. Cómo último, decora con el salmón ahumado, o si lo prefieres con unas anchoas.
Mas fácil imposible.
¡Qué aproveche!

domingo, 27 de enero de 2008

Ramen (cocina japonesa)


Plato japonés, accesible, barato y para todos.

Los ingredientes de este plato son muy sencillos y fáciles de encontrar, quizá lo más especial sean los fideos que se utilizan: Son fideos Vermicelli, que se venden en hatillos y envasados.

Yo los encuentro sin problemas en grandes hipermercados. Tal vez sean fáciles de encontrar también en tiendas chinas. Desde luego en El corte ingles, Carrefour, Alcampo o Caprabo se encuentran sin dificultad en la sección de comida extranjera. De todas formas, su nombre (Vermicelli) facilita que podáis buscarlos por internet, si vivís en países donde no existan estas cadenas de hipermercados.

Estos fideos son una comida muy extendida en Japón, donde se venden en envases para prepararlos de forma instantánea. El creador ha vendido millones de envases de esta popular comida el señor Momofuku Ando, puso a la venta estos fideos instantáneos en 1948, hasta hoy. Murió recientemente a la edad de 96 años de un ataque al corazón.

La composición de esta "pasta" es lo que le hace realmente interesantísimo. Sus ingredientes son: almidón de habas de mungo, es decir, soja verde. Es un producto muy sano y conveniente para todos, especialmente para las mujeres. Os animo a probarlos, tal vez descubráis una pasta mucho más rica y sana que la de trigo a la que estamos acostumbrados.

Es un plato un poquito picante. Lo digo por los niños. Si lo van a comer ellos, tal vez deberíais suprimir las cayenas.

Ingredientes para cuatro personas:
  • 1 cebolla
  • 3 ajos grandes.
  • 2 cebolletas.
  • 1 apio
  • 1 litro de caldo de pollo (en su defecto vale perfectamente una pastilla concentrada disuelta en un litro de agua caliente)
  • 1 litro de caldo de verdura (en su defecto vale perfectamente una pastilla concentrada disuelta en un litro de agua caliente)
  • 3 cayenas (o gindillas pequeñitas)
  • Hierbabuena seca (al gusto. Yo le pongo media cucharadita).
  • 2 cucharadas soperas de salsa de soja.
  • 1 vaso de vino blanco.
  • Fideos Vermicelli (3 hatillos para 4 personas).
  • 1/2 kilo de magro de cerdo troceado.
  • Sal y pimienta al gusto
  • Aceite de oliva.

Modo:

Picar toda la verdura y sofreír a fuego lento toda junta. Cuando esté bien pochada y blandita añadir la carne de cerdo troceada y previamente salpimentada a vuestro gusto.

Cuando la carne haya tomado color se retira todo y se reserva aparte.
Mezcla los dos litros de caldo (el de pollo y el de verduras) y añádele las cayenas. Deja hervir unos cinco minutos todo junto y retira del fuego.

Pon de nuevo al fuego la sartén con las verduras y la carne y añade vino blanco, que tendrás que dejar reducir durante 5 minutos. Ahora echa la salsa de soja. Rehoga todo junto un par de minutos y echa todo esto en el caldo que tendrás ya hirviendo.

Es el momento de añadir la hierbabuena (o menta) y dejar hervir todo junto durante 10 minutos más.

En una cacerola aparte pon agua (sin sal ni grasa) a hervir. En un litro más o menos puedes echar los fideos vermicelli.
Estos fideos no necesitan hervir. Según los eches en el agua, retíralos e fuego y déjalos dentro del agua, sino se quedan completamente secos y pegados entre sí.

La manera de servir este plato es la siguiente: Se sirve la sopa con la carne en cada plato. En el centro de la mesa se colocan los fideos (con el agua de cocción) y cada persona se va sirviendo sobre su plato de sopa la cantidad de fideos que desee. Seguro que más de uno repite.

Es un plato muy suave y se digiere muy bien. Yo lo tomo como plato único, ya que contiene carne, verduras y los fideos más sanos del mundo.
Animaos a probarlo. Estoy segura de que os agradará el gusto de este plato un poco desconocido en nuestro país.
¡Que aproveche!

viernes, 25 de enero de 2008

Espaguetis con gambas. (integrales)


Un plato de pasta integral que todos podemos comer. Que te engordará la mitad que cualquier otro. Es muy rápido de preparar y es un lujo.
Las cantidades de esta receta son para dos personas. Añade el doble de gambas y 1 ajo más para cuatro personas.
Te aconsejo que no añadas más cayena. Quizá quedaría demasiado picante, con tres ya es suficiente, a no ser que te guste que pique mucho.

Ingredientes:
  • Espaguetis integrales.
  • 3 ajos picados.
  • 2 cayenas aplastadas
  • aceite de oliva
  • 1 copita de jerez seco.
  • 10 ó 12 gambas peladas crudas por persona (yo las compro congeladas, son mas baratas y salen buenas).
Modo:
Cuece normalmente la pasta en abundante agua con sal. Recuerda que la pasta integral necesita un poquito más de tiempo que la normal. De todas formas en el envase pondrá el tiempo. Te aconsejo que la dejes "al dente" es decir, un pelín dura, dicen que se digiere mejor que si la dejas muy pasada.


Pica tres ajos en trocitos no demasiado pequeños. Pon aceite en una sartén (3 ó 4 cucharadas soperas) cuando esté calentito echa el ajo y las cayenas. Si el ajo ya ha cogido color dorado es el momento de añadir las gambas y retirar del fuego. De esta forma quedan jugosas porque no se fríen en exceso. Ahora vuelve a poner al fuego fuerte y añade la copita de Jerez, realiza un movimiento suave giratorio y deja que hierva 1 minuto.

Modifica la cantidad de ajo y de cayenas a tu gusto. Pon la pasta en un plato y riega con el contenido de la sartén los espaguetis. Cómetelo rápido, calentito.
Te aseguro que repetirás.
Es delicioso.

¡Qué aproveche!

miércoles, 23 de enero de 2008

Pechugas de pollo con verduras y salsa de soja.


Un plato muy ligero para todos. A los niños les gusta porque se come todo y ya está cortado. A los que son como yo, les gusta porque no engorda nada y es rico y facil.

Se hace en poco más de 15 minutos y los ingredientes son sencillos. Esta preparación es ideal para hacerla en un wok, pero como todos no lo tenemos, pues nos apañamos con una sartén grande. Si disponéis de un wok utilizarlo en la forma adecuada. Con la sartén, es necesario que el aceite esté bien caliente y no parar de remover.

Ingredientes para 4 personas:
  • 3 pechugas de pollo limpias y troceadas en tacos.
  • 2 cebollas troceadas (en trozos grandes)
  • 4 pimientos verdes troceados (también grande)
  • Sal
  • Salsa de soja.
  • Pimienta al gusto.
  • Aceite de oliva.
Modo:

Corta todos los ingredientes en trozos grandes (el pollo que no haya que cortarlo para comerlo) y pon el aceite (poco) en el fuego fuerte, cuando esté caliente, echa la cebolla y revuelve constantemente durante un par de minutos. Ahora saca la cebolla a un plato y repite la operación con el pimiento. Esta vez mantén el pimiento un poquito más de tiempo (unos cuatro minutos).
Tanto la cebolla como el pimiento ha de quedar duritos, no muy hechos para que el plato tenga un gusto crujiente al comer.

Con las verduras apartadas en un plato haz el pollo (ya salpimentado a tu gusto) también a fuego fuerte y sin dejar de remover. Cuando esté hecho, añade la cebolla, el pimiento y un chorrito de salsa de soja (la encontrarás sin dificultad en cualquier supermercado). La salsa de soja tiene un peculiar sabor, suave y agradable. Prueba con una cantidad equivalente a 2 cucharadas soperas para probar. Si te agrada, la próxima vez puedes poner más cantidad.

Remueve solo un par de minutos y el plato está listo para comer. Si lo acompañas con unas patatitas cuadradas fritas, el plato es completo.

¡Qué aproveche!

domingo, 20 de enero de 2008

Cocido madrileño.


El cocido madrileño es un plato muy completo, para tomar en invierno por su gran contenido calórico. Sus ingredientes son muchos, variados y sanos.
El resultado es un plato que consta de varias partes, una vez terminado. Tendrás una riquísima sopa, un segundo plato de carne acompañado de un rehogado de verduras. Además, con las sobras (que siempre las hay) os explicaré, en otra receta, cómo hacer unas deliciosas croquetas.

Hay muchas personas que hacen el cocido en olla rápida. Esto se pude hacer perfectamente, pero si tienes tiempo y ganas, yo recomiendo hacerlo en una cacerola abierta y dejar que cueza lentamente. Total, solo tienes que vigilar de vez en cuando y mover un poquito. Pero claro, has de disponer de dos horas de cocción, cuando en una olla a presión es cuestión de 20 minutos.

Los ingredientes son muchos, pero puedes añadir o eliminar cualquiera de ellos que no te guste y experimentar por tu cuenta con otras cosas. Yo te pongo la combinación que utilizo y que te asegura que el plato es muy rico.
Las cantidades son para cuatro personas, pero yo, normalmente, hago más cantidad (el doble de todo) y congelo el caldo que me sobra y hago croquetas con el resto. Tardas lo mismo y te soluciona la comida de varios días.
El plato consta del caldo y de repollo cocido aparte y de garbanzos, que tendrás que poner en remojo la noche anterior ha hacer el cocido.

Ingredientes para el caldo:
  • 2/4 traseros de pollo.
  • 1 esqueleto de pollo.
  • 250 gr. de carne de morcillo de ternera.(o zancarrón)
  • 1 hueso de vaca de rodilla.
  • 1 hueso de vaca de caña.
  • 1 hueso de jamón.
  • 1 trozo pequeño de tocino fresco (unos 50 gr.).
  • 1 chorizo (rojo para guisar).
  • 1 morcilla de arroz.
  • 2 zanahorias.
  • 1 trozo de calabaza.
  • 1 puerro.
  • Sal al gusto
Pon todo esto en un recipiente y cubre generosamente de agua, Si lo haces en una olla a presión, utiliza el tiempo que te recomiende el fabricante. Si lo haces como yo, ponlo a fuego fuerte hasta que empiece a hervir y luego bájalo para que hierva suave durante dos horas.Cuando el caldo lleva 45 minutos hirviendo añade los garbanzos al caldo. (Si los metes en una bolsita de algodón (se vende a propósito en tiendas especializadas) luego será más fácil recuperarlos del caldo y no se destrozarán con los huesos y demás ingredientes.
De vez en cuando retira con una espumadera la espuma que se acumula en la parte de arriba y tíralo, son impurezas que no nos interesa comer. Remueve para que los sabores se vayan mezclando.
Mientras el caldo se hace haremos el repollo.

Ingredientes para el repollo:

  • 1 repollo.
  • 5 ajos.
  • Aceite de oliva.
  • Pimentón dulce.
  • Sal.
Mientras el cocido se va haciendo, en un cacharro aparte pon agua con sal y corta el repollo en trozos e hiérvelo durante 20 minutos, que veas que está tierno y retira del fuego.
En una sartén al fuego fríe los ajos enteros, cuando estén dorados retira la sartén un momento del calor y añade una cucharada de pimentón. Remueve deprisa para que no se te queme y echa rápidamente el repollo casi sin escurrir dentro de la sartén, otra vez en el fuego y rehogalo con el pimentón y los ajos.
El repollo ya está listo. Déjalo aparte para luego servirlo como acompañamiento de la carne.

A las dos horas aprox. el caldo está terminado. Coge una fuente y ve sacando todos los ingredientes del caldo.
Quita el hueso del pollo y deja la carne limpia corta en trozos el morcillo, el chorizo, la morcilla, el tocino, los garbanzos, la calabaza y la zanahoria.
Pon todo en una bandeja para que cada uno se sirva lo que quiera, después de la sopa.
Cuela bien el caldo y puedes tirar los huesos que nadie va a comer.

En el caldo ya limpio, yo normalmente pongo a cocer unas patatas (sobre todo si hay niños). Esto hace que el caldo espese un poquito. Después las patatas las sirvo con la carne.

La sopa se puede tomar como un consomé (sin pasta) o con fideos (integrales o normales) tipo cabello, muy finitos.
Una sugerencia: Si pones unas hojitas de hierbabuena en la sopa... os encantará.

Como veis es un plato complicado por el tiempo que lleva hacerlo, pero soluciona una comida completa y, si hacéis cantidad, se puede congelar todo lo que sobre.
La próxima receta haré unas croquetas con las carnes de pollo y de morcillo que seguro que os sobran.
Y un último truco. Si deseas desgrasar el caldo: Deja que se enfríe, mete en el frigorífico y se formará una capa sólida en la parte de arriba que puedes retirar tranquilamente con una cuchara y eliminarás, así casi toda la grasa del caldo, convirtiéndolo en un cocido ligero para cualquiera.
Animaros ha hacerlo.
¡Qué aproveche!

jueves, 17 de enero de 2008

Bienmesabe (Delicia de pescado).

Plato típico de Andalucía. Lo he comido tantas veces de niña, que me satisface comprobar que puedo hacerlo en casa sin ninguna dificultad. Solo requiere un poco de paciencia y pocos ingredientes.
Este plato se hace con un pescado que se llama Cazón (en realidad es tiburón) Es una carne suave con poco sabor y muy acuosa. Blanco y sin espinas, salvo un hueso central. Fácil de limpiar y de trocear. Para los niños es ideal porque es muy cómodo para comerlo. Este pescado también es muy bueno para sopas y caldos. Otro de sus atractivos es el precio. Es muy barato.
Pero en este caso vamos con el "Bienmesabe" que por algo se llama así.

Ingredientes:

Para el adobo: (dejarlo sumergido en este adobo 24 horas exactamente)

  • 3 dientes de ajo
  • 1 cucharada de pimentón dulce
  • 1 cucharada de orégano seco
  • 1 cucharada de cominos
  • 1 vaso de vinagre de Jerez (es importante que sea este vinagre, pero si no es posible, utilizar un vinagre de calidad)
  • Agua para cubrir

Para la fritura:
  • 1 kilo de cazón troceado y limpio.
  • Sal
  • Harina especial para pescado (es una harina que contiene: harina de trigo duro y sémola de trigo duro, que le da una consistencia al frito especial)
  • Aceite de oliva (bastante cantidad)
Modo: Lo primero es preparar el adobo. Echa en un mortero la cucharadita de cominos y machácalos, después añade el ajo en trozos el orégano y el pimentón y un poco de sal y machaca todo junto hasta que te quede una pasta más o menos triturada (tampoco hace falta que esté completamente triturado). Añade al mortero el vaso de vinagre y revuelve un poco. Aparte, pon en un recipiente que puedas cerrar y guardar en el frigorífico, el pescado ya salado y troceado en dados. Vierte el contenido del mortero sobre los trozos y añade agua hasta cubrir justo. Muévelo para que todo se mezcle y el líquido llegue a todos los trozos. Cerrado, déjalo en el frigorífico 24 horas exactas. Esto es muy importante, así que tenlo en cuenta para cuando vayas a freírlo y comerlo. Adóbalo justo 24 horas antes de hacerlo.
Cuando lo saques del frigorífico pasadas las 24 horas échalo en un escurridor y déja que suelte el líquido. No lo laves ni le pongas agua.

Mientras escurre, pon al fuego una sartén honda con dos dedos de aceite de oliva y deja que se caliente bien (hasta que empiece a echar humo). Pon la harina en una fuente y ve rebozando cada trozo (que seguirá húmedo) y echa en la sartén con el aceite bien caliente. Ve poniendo los trozos ya fritos sobre un papel de cocina para que absorba el exceso de grasa (prácticamente no absorbe aceite por la temperatura de éste). Este plato se puede comer perfectamente en frío.
Como sugerencia te diré que la mayonesa especial que os enseñé anteriormente le vá muy bien, el tomate frito y sobre todo el zumo de limón.
Estoy segura de que volveréis a cocinar este plato. Es delicioso.
¡Que aproveche!


lunes, 14 de enero de 2008

Hojaldre con pimientos rellenos de carne.

Este plato tiene un sólo y único inconveniente, su preparación requiere un poco de tu tiempo. Por lo demás es muy fácil de hacer. A ver si de una vez perdemos todos el miedo de manejar el hojaldre. Muchas personas con las que hablo se echan para atrás a la hora de preparar una receta con hojaldre porque creen que no saldrá bien, que es complicado, etc... Con esta receta, si me hacéis caso y la preparáis, el hojaldre pasará a formar parte habitual de vuestra cocina. Le gusta a casi todo el mundo y sobre todo a los niños. Permite ser rellenado con casi cualquier cosa, dulce o salada.


Pero hoy vamos a hacer unos pimientos del piquillo rellenos de carne picada y envueltos en hojaldre. Vamos allá.

Ingredientes: (para 4 personas)
  • 2 paquetes de hojaldre (envases refrigerados. Es una masa redonda ya estirada y enrollada).
  • 1/2 kilo de carne picada de cerdo aliñada y rehogada el día anterior (se puede usar cualquier carne, prefiero la de cerdo por ser más jugosa, pero también se puede hacer con pavo, pollo, ternera)
  • 8 pimientos del piquillo grandes. (los de lata extras son buenos).
  • 2 yemas de huevo batidas.
Aliño para la carne: (debe aliñarse al día anterior. Unas horas antes de hacer el plato rehogarla en una sartén con un poquito de aceite) Rellena los pimientos con la carne templada.
Los ingredientes que van sin cantidad, son al gusto del cocinero. Y todos ellos se echan sobre la carne sin un orden específico y se van mezclando para luego dejar reposar en el frigorífico durante 24 horas aprox.
  • Sal.
  • 2 huevos enteros
  • Orégano.
  • Perejil.
  • Vino blanco (una copita pequeña).
  • Pimienta negra molida.
  • 4 ajos muy picados.
  • Nata líquida (una copita pequeña).
Modo:

Rellena los pimientos con una buena cantidad de carne picada y ya hecha. Ayúdate de una cuchara y procura no romper los pimientos.

Una vez rellenos corta la placa redonda de hojaldre en cuatro partes iguales con un cuchillo de punta. Cada triángulo servirá para envolver un pimiento ya relleno.

Cuando los tengas todos cerrados (cierra todos los picos con las manos) pon un papel especial para horno sobre la bandeja de éste, y coloca los pimientos contrapeados para que te quepan todos. (mira las imágenes más abajo)
Ahora bate las yemas de huevo y, con un brocha (o con la mano si no tienes) unta la parte de arriba de cada hojaldre. Esto se hace para que adquiera un color dorado dentro del horno.

Mete la bandeja en el horno a 220 grados con calor arriba y abajo, durante aproximadamente 20 minutos. Te aconsejo que lo vigiles a los 15 minutos y después cada 3 minutos. Puedes abrir tranquilamente el horno para ver cómo van. Cuando estén dorados, como el color de pan, ya están hechos.

Puedes prepararlo horas antes y luego calentarlos al horno a temperatura baja (100 grados) un rato antes de comer. No se estropearán. Incluso puedes guardar, si sobran, en el frigorífico para el día siguiente. No los calientes en el microondas, se quedan como el chicle.

A continuación puedes ver en fotografías todo el proceso. Espero que sea de tu ayuda.


Anímate ha hacerlo. Te chuparás los dedos, y tu gente también.
Que aproveche.